Calamocha cuenta con un nuevo museo sobre piedras y rocas en el parque municipal Rafael Angulo

 

 El Ayuntamiento de Calamocha ha sumado una nueva exposición en el municipio con la creación del Museo de las Piedras, situado en el parque Rafael Angulo. Se trata de un proyecto de la Fundación San Roque con una muestra al aire libre y la descripción en paneles de varios tipos de piedras y rocas situadas en este enclave municipal.

La exposición está abierta al público en el horario de apertura del parque desde la finalización de la instalación y distribución de los paneles informativos el pasado mes de noviembre.

En este museo se puede observar diferentes tipologías de piedras y rocas con un enfoque dividido en dos materias: un carácter geológico y, por otro lado, etnográfico. Las piedras y rocas ya se encontraban en el parque calamochino y ahora los vecinos y visitantes pueden conocer su historia y significado con la instalación de los paneles informativos, cuya descripción ha sido redactada contando con la colaboración del geólogo José Carlos Rubio.

En el caso de la parte etnográfica, encontramos diversos elementos como un regulador de caudales procedente de la casa Rivera, pilas de lavado, un hito de carretera, prensas de aceite, miel y vino, un brocal de pozo que se encontraba en la ermita de Santa Orosia o un conducto de agua. En la entrada del parque, además, nos dan la bienvenida los pilares rescatados de la antigua fachada del Ayuntamiento de Calamocha.

Este museo se suma a otros recorridos o puntos temáticos con los que cuenta el parque, como son el rincón y ruta literarios, los paneles sobre naturaleza, el monumento de los mayordomos de San Antón, los árboles de los quintos o el espacio que protagoniza el ciervo volante.

El valle del Jiloca posee uno de los registros geológicos más importantes a nivel de Aragón y también de la Península Ibérica. A lo largo del mismo afloran sedimentos y materiales que van desde la era paleozoica a la cenozoica. Rocas detríticas, conglomerados sedimentarios, pizarras, rodeno, yesos, rocas metamórficas, arcillas son rocas que podemos encontrar en el territorio dotándolo de una gran singularidad paisajística.

Para ejemplarizar esta riqueza geológica, se ha creado en el parque municipal este espacio denominado como Museo de las piedras «que pretende ser un aula abierta en la que conocer las diferentes rocas, su formación en las distintas épocas geológicas y los lugares de la comarca del Jiloca donde aparecen», ha detallado el alcalde de Calamocha, Manuel Rando. Además, ha añadido, los paneles expositivos dan a conocer los usos que el hombre ha hecho de las mismas a lo largo de la historia.

El Museo de las piedras «pretende poner en valor la riqueza del territorio y su importancia a través del paso del tiempo, completando de esta forma el desarrollo cultural y medioambiental del parque municipal», ha detallado.

En referencia a los ejemplares de rocas, se expone una amplia muestra. Una de ellas es la roca travertino, procedente de la localidad, sedimentaria de la Era Cenozoica que constituye una parte importante del sustrato en el que se asienta Calamocha.

Otro ejemplare es la pizarra, una roca metamórfica de la Era Paleozoica. Se puede observar en Castejón de Tornos o en los montes de Luco de Jiloca, de donde procede la roca situada en el parque Rafael Angulo.

La cuarcita es muy abundante en Valderde, El Poyo del Cid, Calamocha o Castejón de Tornos. El sílex aparece en el parque en forma de nódulos, acumulaciones de este mineral dispuestas entre la caliza que lo contiene. Está formado por millones de microcristales de cuarzo unidos entre sí, como si se tratara de un único cristal. Las aristas que suele dejar al fracturarse y su dureza hizo que fuera utilizado antiguamente para hacer herramientas. Han aparecido yacimientos del Neolítico en Torre los Negros, Cucalón o Navarrete del Río.

Otras rocas de la exposición del Museo son la ferruginosa, la caliza continental -procedente de El Poyo del Cid-, la brecha, la arenisca o el alabastro. Sobre esta última, procede de Navarrete y se solía utilizar a modo de cristal en las ventanas de algunos edificios en épocas pasadas

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